Van pasando los días y se huele en el ambiente el miedo, pánico e incertidumbre. Tómate unos instantes para pensar, si, eres un ser racional (a veces). El Coronavirus es similar a una gripe, no seas alarmista, tu mente te puede jugar malas pasadas. En el artículo de hoy vamos a ver cómo nuestra mente puede provocar efectos negativos en nosotros mismos y nuestro entorno. Respira hondo y lee conmigo.
La desconexión del cerebro racional del emocional
El temor a que el Coronavirus entre en nuestras casas se está propagando más rápidamente que el propio virus. La cura a esto es la información y la calma. No dejes que la emoción generada por un temor que va más allá de la realidad se imponga a la razón. Tal y como lo destaca Alexandre López-Borrull, experto en comunicación científica de la UOC, los ingredientes que provocan este temor irrefrenable es que afecta a la salud, nace en la otra punta del mundo (lo cual genera desconfianza) y la mayoría de la población no es experta en el tema.
Por tanto, para deshacernos de este nudo que nos ata a un temor constante debemos gestionar el miedo con la razón. Piensa y genera emociones positivas. Que locura, ¿verdad? Hazlo conmigo: «es un virus con bajo índice de mortalidad y los profesionales están trabajando muy duro para controlar su propagación». Haz uso de la razón, utiliza tu corteza prefrontal, esa que te dota del poder de razonar y tomar decisiones.
La desconfianza
Confía en las autoridades, está todo bajo control. Infórmate en sitios fiables y cuidado con las fakenews o los bulos, deséchalos y no los compartas. Aunque te bombardeen con noticias, filtra las más claras y transparentes, más información no quiere decir que estés más informado, valga la redundancia.
Alarmismo excesivo
Tal y como he dicho antes, no dejes que el miedo se apodere de ti. La preparación a nivel individual es importante. Piensa cómo trabajarías o cómo te organizarías si llega el virus, al tener un plan vamos a sentirnos más preparados y calmados. No es cuestión de no hablar del tema y esconderlo. Se debe hablar claro, basándose en datos reales y fiables. Si tienes más dudas o ves que aparecen síntomas, pregunta y consulta a profesional aptos.
Exceso de precauciones y prevenciones
Las medidas que lleves a cabo ante el Coronavirus para prevenir deben ser las que sean evidenciadas por los profesionales de la salud y no basadas en la ficción. Lleva una vida normal, cogiendo el transporte público, llevando a tus hijos al colegio, yendo al supermercado… Préstate atención y no hagas uso de un control constante de la limpieza (desinfectarse las manos cada «x» minutos, hipervigilancia de tus síntomas físicos, etc). Esto, paradójicamente, puede desencadenar que pierdas el control y la ansiedad se apodere de ti.
No dejes que la sombra de la irracionalidad te acompañe todo el día. Vive tu vida, disfrútala y no dejes que el miedo te enferme, es una emoción muy valiosa y no merece este trato.
El miedo es como el fuego, si lo controlas, te calentará y te mantendrá vivo, pero si te controla a ti, te quemará y te destruirá, Rocky Balboa.
No te pierdas el artículo sobre el miedo ante el Coronavirus y cómo hacerle frente.
Andrea Martínez Pellicer
Agradecimientos a maldita ciencia por sus maravillosas viñetas con un toque de humor y realidad.